En el futuro, el alma será eliminada por la medicina. Con el pretexto de la salud, habrá una vacuna mediante la cual el organismo humano será tratado lo antes posible, posiblemente directamente al nacer, para que el ser humano no pueda desarrollar la conciencia del alma y el Espíritu. A los médicos materialistas se les encomendará la tarea de quitar el alma de la humanidad. Como hoy, las personas se vacunan contra enfermedades específicas, por lo que en el futuro, los niños serán vacunados con una sustancia que inmunizará contra la " locura" de la vida espiritual. La persona vacunada podría ser muy inteligente, pero no desarrollaría la conciencia, y ese es el verdadero objetivo de algunos círculos materialistas.
Con tal vacuna, podría lograr que el cuerpo etérico se separe del cuerpo físico. Cuando el cuerpo etérico se desprende, la relación entre el alma y el universo se vuelve extremadamente inestable y el hombre se convierte en un autómata, porque el cuerpo físico del hombre debe ser pulido en esta Tierra por la voluntad y el esfuerzo espiritual. Entonces la vacuna se convierte en una especie de fuerza que fija la conciencia a la materia. El hombre ya no puede deshacerse del sentimiento materialista. Sigue siendo animal por constitución y ya no puede elevarse a la conciencia espiritual .
La agenda para eliminar el alma con la medicina va mucho más allá de la vacuna. Casi todos los productos farmacéuticos, hasta cierto punto, pueden adormecer el cuerpo emocional y etérico; las drogas psiquiátricas son algunos de los peores infractores. Como alguien que estaba tomando drogas psiquiátricas (que ni siquiera necesitaba) durante muchos años, puedo decirles que me desconectaron de mi corazón, mi intuición, mi verdadero yo e incluso mi conciencia. Ningún trabajo profundo del alma o curación podía tener lugar hasta que dejara esa medicación. Una vida holísticamente sana es la cura.
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