Guerra Psicológica

La guerra psicológica tiene como objetivo el erosionar la moral y deshumanizar a las personas que ven como enemigos. Al intentar destruir su dignidad y moralidad, puede alentarlos a retirarse, rendirse o desertar en lugar de enfrentarlos o vencerlos en el combate físico. La desmoralización y la deshumanización es la herramienta más importante de la guerra psicológica y la tortura intencional utilizada para quebrar a una persona. La desmoralización se implementa más comúnmente a través de diversas formas de propaganda para debilitar a las personas, mientras que la deshumanización es comúnmente utilizada por los satánicos.
La Guerra Psicológica es el uso deliberado de varias manipulaciones, técnicas de promoción y engaño, como difundir propaganda y terrorismo, para inducir o reforzar actitudes que son favorables para obtener una ventaja estratégica sobre otros. Sun Tzu, un estratega militar chino, dijo originalmente que la mejor victoria en la guerra es aquella en la que nunca tendrás que luchar contra tu enemigo en un combate real.
En el pasado, se pensaba que tales esquemas maquiavélicos retrataban el comportamiento tortuoso de criminales y déspotas, que se creía tenían rasgos de carácter humano indeseables e incluso atroces. Hoy estos comportamientos extremadamente negativos se normalizan y se aplican comúnmente en las operaciones comerciales del mundo cotidiano, al recompensar económicamente a las personas que actúan como depredadores. Por lo tanto, el campo actual requiere que comprendamos los conceptos más comunes de la guerra psicológica, porque estamos expuestos a ella todos los días.