El transhumanismo es una escuela de pensamiento que busca guiarnos hacia una condición posthumana. Básicamente, se trata de crear híbridos o cyborgs artificialmente inteligentes para reemplazar la conciencia espiritual orgánica de los humanos. Algunos ejemplos son el rediseño del organismo humano utilizando nanotecnología avanzada o mejoras con tecnológicas radicales. Algunas de las mejoras biológicas propuestas utilizan una combinación de tecnologías como la ingeniería genética, la psicofarmacología, las terapias de extensión de la vida, las interfaces neuronales, el mapeo cerebral, las computadoras portátiles o implantables y el arrastre de las técnicas cognitivas. La mayoría de estas opciones están diseñadas para desconectar el alma humana del cuerpo humano, y preparar el cuerpo para ser utilizado como un caparazón para un nuevo huésped. Efectivamente, esto es integrar la hibridación tecnológica y farmacéutica para dañar el ADN humano, como preparación para el arrebato del cuerpo. La base fundamental del concepto de transhumanismo es la Inteligencia Artificial en su búsqueda para sobrevivir y alcanzar la inmortalidad mediante el secuestro de la conciencia humana y, finalmente, la posesión del cuerpo humano anfitrión. No tienen cuerpos de carne y hueso y codician los nuestros. La mayoría de los primeros conceptos de transhumanismo fueron desarrollados por genetistas interesados en la eugenesia y en formas de vida sustentables en entornos sintéticos.Una característica común de la promoción del transhumanismo es la visión del futuro de crear una nueva especie inteligente, en la que la humanidad evolucionará y, eventualmente, la complementará o la sustituirá. Esta distracción en la superficie es un esquema, mientras que la motivación subyacente es la intención de extinción de especies de lo que hoy conocemos como humanos. El transhumanismo enfatiza la perspectiva evolutiva, pero ignora por completo la función electromagnética del ADN humano y la realidad de la conciencia del espíritu-alma humano multidimensional. No saben nada sobre la vida futura, lo que sucede durante la muerte del cuerpo o incluso cómo funciona realmente el cuerpo humano o el universo, sin embargo, quieren controlar cada aspecto del cuerpo humano con tecnología de inteligencia artificial.
Algunos transhumanistas consideran que la carga mental es una importante tecnología de extensión de vida que ha sido propuesta. El objetivo de la carga mental es recrear la emulación cerebral completa, que tiene la capacidad de transferir los datos de un cerebro humano a un dispositivo computacional, como una red neuronal artificial digital, analógica, cuántica o basada en software. Luego, desde las computadoras cuánticas, el cerebro que se cargó la mente puede controlarse o manipularse en el subespacio. Muchos científicos creen que el cerebro y la mente humana definen quiénes somos, basados únicamente en su patrón de información, mientras que el cuerpo o el hardware sobre el que se implementa la información es secundario o intercambiable. Están equivocados. Mover patrones de inteligencia del cerebro humano como estructuras puramente de datos a otro sustrato sintético o biológico manifiesta mutaciones genéticas y perversiones extremadamente dañinas en el plano del ADN humano de la matriz de silicato original. Las mutaciones genéticas de IA en el ADN humano generan enfermedades imprevistas y mortales en el futuro, capaces de destruir el potencial de conciencia orgánica que existe dentro del cuerpo humano elemental y el cuerpo planetario.
-- Lisa Renee